REGRESAN LOS MADRILEÑOS A LAS ROCAS DE LAVA

                     Comentario de Javier Gonzalez
       Parecía que fue ayer, pero habían pasado ya dos años desde que estuvimos
   la última vez con Manolo haciendo jigging.
       El mar perfecto, la compañía la mejor y el material a "son de mar".
   La proa rumbo hacia las marcas "secretas" donde se mueven los grandes samotes,
   y así fue - todos abajo dijo Manolo.

       Un par de sube y bajas y rápidamente grito Carlos, "la tengo".
    La caña curvada, el pescador tenso pero relajado porque ya conoce lo que es.

       Parece que es gordo dice Manolo y además sama,

        "y no falla", a los 10 minutos aparece por la "aleta de babor".
     Una vez más Carlos inagura el marcador.

       El patrón comenta que lo siguiente debe ser mero y nos deja sobre unas marcas.

       Al poco rato la caña de Javier se curva,-"mero"-dice Manolo,

    y no falla .

       Un mero de un buen tamaño, que hacía poco que se había comido un pulpo,
     que le salía por la boca.

       Seguimos sobre la marca y al poco tiempo Carlos queda con la caña doblada
   y compensando la embestida del pescado.

       Otro mero que no esta nada mar.

       Manolo:  Después de varios intentos más sin resultado, probablemente por
    la fuerte corriente que teníamos,

      decidimos poner rumbo de regreso a la base.